Escudero, Leoncio
De edad y profesión desconocidas. Era residente en Alicante.
Cuando comenzó la Guerra Civil, fue detenido por motivos políticos ya que era de ideología derechista.
El 28 de noviembre de 1936 la aviación nazi efectuó un bombardeo de más de 7 horas sobre Alicante. Como represalia, al día siguiente unos milicitanos republicanos sacaron a 52 presos políticos de la cárcel para ejecutarlos.
Fueron llevados al Cementerio de San Blas dentro del autobús incautado al Hércules, con la intención de fusilarles y enterrarles allí.
De los 52 presos, Leoncio Escudero fue el único que salvó la vida. Hay 2 versiones acerca de como lo logró. Una es que aprovechó un descuido para escaparse del grupo antes de los disparos. Otra es que se hizo el muerto, y se quedó tumbado entre los cadáveres hasta que los milicianos se fueron.
En cualquier caso, logró saltar las vallas del cementerio y escapar campo a través.
Sobrevivió a la Guerra, y no hay constancia de que fuera de nuevo detenido. En la Posguerra, su testimonio fue uno de los más importantes para esclarecer lo sucedido aquel día tanto en el Reformatorio de Adultos (la prisión donde estaban detenidos, los actuales juzgados de Benalúa) como en el camposanto.
Se sabe que se quedó residiendo en Alicante durante el resto de su vida.
FUENTES:
- "La representación del enemigo en el Derecho penal del primer franquismo (1938-1944)" Ignacio Tébar Rubio-Manzanares