La Casa de la Asegurada es la construcción civil más antigua de Alicante de las conservadas actualmente. Se construyó en 1685 por el Ayuntamiento, y se le dio un uso de depósito de trigo o granero municipal. En la planta baja se ubicaban los almacenes de la harina, en la primera las oficinas y en la segunda el granero.

En el siglo XVIII se encontraba en estado de franco deterioro, por lo que tuvo que ser reconstruida. Dicha obra se llevo a cabo por parte de los arquitectos Vicente Mingot y José Terol.

Pasan los siglos, y al principio del XIX estalla en España la Guerra de la Independencia. Los franceses destruyen en un bombardeo el Palacio Consistorial, y la Asegurada pasa a ser el nuevo Ayuntamiento Provisional.

Construido más tarde el nuevo Consistorio, la Asegurada queda como Parque de Artillería, e incluso  llegó a ser una cárcel durante algún tiempo. A partir de 1845 pasa a ser el nuevo Instituto de Segunda Enseñanza (actual IES Jorge Juan). Años más tarde el Instituto se traslada, y en 1893 se convierte en la nueva Escuela de Comercio de Alicante.

En 1966 se propone el edificio para ser la sede del nuevo Archivo Municipal. Comienzan así las obras para su acondicionamiento. Tras largos años de reformas, en 1976 el artista onilense Eusebio Sempere propone al Ayuntamiento convertir la Asegurada en el nuevo museo de arte moderno referente de España.

La idea es acogida con emoción, y los concejales del consistorio votan por unanimidad su puesta en marcha. El Ayuntamiento no obstante propuso como sede el Castillo de Santa Bárbara, pero Eusebio consiguió convencerles de que la Asegurada cumplía con la historia y las condiciones idóneas para el nuevo museo.

Sempere se vuelca con el proyecto. Donó su colección privada y adquirió otras muchas obras, incluyendo cuadros de artistas tan contrastados como Joan Miró, Picasso, Julio González, Juan Gris, Kandinsky, Dalí, Chagall, Arp, Calder, Bacon, Giacometti, Tàpies, Pablo Serrano, Millares, Saura, Guerrero, Chillida, Vasarely, Agam, Soto, Rauschenberg, Oldenburg, Equipo Crónica, Canogar o Christo.

Muchas de estas obras tuvo que comprarlas de su propio bolsillo o pagarlas a cambio de obras suyas propias, algunas incluso que ni siquiera había pintado aún. Con el beneplácito del alcalde Ambrosio Luciáñez y la colaboración de los galeristas Paco Pastor y Gonzalo Fortea, Eusebio trabaja día y noche para poner en marcha el museo. Al fin todo su empeño vio la luz el 5 de noviembre del 77, día de la inauguración del nuevo Museo de la Asegurada.

Aunque los políticos presentes, como el alcalde o el Ministro de Cultura Pio Cabanillas acaparan los discursos, finalmente Eusebio Sempere es forzado a decir unas palabras: “(…)Es el acontecimiento más importante de mi vida. Hoy me siento como si hubiera tenido un hijo. He muerto un poquito en mi casa y he resucitado en Alicante”.

Como antes se mencionaba, Sempere tenía la clara intención de convertir la Asegurada en un museo referente en todo el país, a la vanguardia de España. Sin embargo, ya desde la misma apertura empieza a encontrar frenos a sus ideas de promoción e innovación artística en el museo, sobre todo a raíz de la llegada a la alcaldía de Lassaletta.

El nuevo alcalde paralizó de hecho algunas de sus iniciativas ya empezadas, como una exposición dedicada a Gabriel Miró. Aunque la exposición se acabó celebrando gracias a la presión de Sempere que incluso tuvo que utilizar a la prensa local, el gobierno de Lassaletta sigue considerando la cultura y el museo como un asunto de segundo orden.

Ante la falta de apoyos del consistorio, las obras artísticas quedan descuidadas. Al cuarto año de existencia, su director Paco Pastor acaba por dimitir alegando que “no hay presupuesto ni para bombillas”.

Incluso la limpieza y la humedad se convirtieron en un serio problema, lo cual comenzó a deteriorar algunas de las obras expuestas. El entonces funcionario municipal y encargado del cuidado del museo Mario López elaboró numerosos informes advirtiendo de la precaria situación del museo, pero fueron todos archivados en el Ayuntamiento.

A pesar de todo esto, Eusebio Sempere quiso donar a su muerte en 1985 toda su obra a la ciudad de Alicante. Con ella se creó en 1997 una sala dedicada enteramente a su persona, con más de 500 piezas.

Afortunadamente, tras años de descuido el Ayuntamiento alicantino volvió a preocuparse del museo, y los problemas de limpieza, humedad y deterioro fueron subsanados.

En 1998 se acomete una gran renovación del museo que culmina con la creación de3 exposiciones permanentes que van rotando termporalmente. Cada cuatro meses, se expone un tercio de la Colección que se aglutina en torno a una gran premisa estética: obras que giran alrededor de las Geometría, o de la Abstracción, o de la Figuración.

En 2002 la Generalitat declara al Museo de la Asegurada como “Museo de la Comunidad Valenciana” en virtud de la nueva ley del Patrimonio Valenciano, y cambia su nombre al actual Museo de Arte Contemporáneo (MACA).

En 2014 se acomete una última ampliación, que propiciará la creación de una sala dedicada a la colección artística personal donada por la pintora alicantina Juana Francés.

El MACA hoy en día es el principal museo de arte de la provincia de Alicante. Aunque nunca llegó a alcanzar la proyección y dimensión con la que soñaba Eusebio Sempere, sus esfuerzos propiciaron la apertura en Alicante de un museo con una más que notable colección artística, en una época en la que apenas existían museos de este tipo en España. En la actualidad es un museo vivo y modernizado, que organiza frecuentes actividades en torno al arte contemporáneo local y nacional.

FUENTES:

- “EUSEBIO SEMPERE. UNA ANTOLOGÍA 1953-1981”. Dionisio Gázquez Méndez.

- Wikipedia