Grau Gómez, Miguel
Joven de fuerte ideología izquierdista, se afilió al Moviement Comunista del País Valencià. Durante los primeros años de la Transición fue muy participativo en manifestaciones y concentraciones.
El 6 de octubre de 1977 se encontraba en la Plaza de los Luceros pegando carteles políticos reivindicando un estatuto de autonomía. Estaba acompañado por 3 jóvenes que también eran militantes de su partido: Llum Quiñonero (24 años), Juan Ángel Torregrosa (19) y Javier Álvarez (14).
De repente un joven llamado Miguel Ángel Panadero, militante de Fuerza Nueva, les lanzó un ladrillo desde el balcón de su casa que impactó de lleno en la cabeza de Miguel, quien perdió inmediatamente el conocimiento.
Sus compañeros le llevaron rápidamente en coche a la Casa del Socorro, y desde aquí fue trasladado al Hospital Público 20 de noviembre (actualmente llamado Hospital General de Alicante).
El 9 de octubre se organizó una gran manifestación conmemorando la toma de Jaime II de Valencia (actualmente reconocido como el día oficial de la Comunidad Valenciana) en la que miles de personas así como los representantes de los principales partidos políticos reivindicaron la figura de Miguel Grau y pidieron que se hiciera justicia. Al día siguiente Miguel Ángel Panadero se entregó a la Policía.
Después de pasar casi 10 días en coma, Miguel Grau acabaría perdiendo la vida en el hospital. Tenía 20 años de edad.
Más de 10.000 alicantinos le rindieron un homenaje trasladando su cadáver fúnebre desde el Hospital a la Plaza de España y desde allí al Cementerio Municipal. Dicha comitiva no fue autorizada por el gobernador civil, por lo que la Policía Armada trató de dispersar a los participantes y se produjeron algunos sucesos violentos. Finalmente el cuerpo de Miguel acabó siendo llevado en coche hasta el Cementerio.
También se le dedicó un homenaje y misa en Valencia, al que acudieron unas 7.000 personas. Además el grupo musical Al Tall compuso una canción a la memoria de Miguel Grau.
En el juicio celebrado al año siguiente, su asesino Miguel Ángel Panadero aseguró que no se trató de un crimen político, sino que le lanzó el ladrillo por las molestias que le suponían ver aquellos carteles en las fachadas de la Plaza de los Luceros. Panadero acabó siendo condenado a 12 años de cárcel, aunque en 1982 salió en libertad gracias a un indulto parcial concedido por el Gobierno de España.
En 2016 se instaló una placa homenaje en la plaza de Luceros a la memoria de Miguel Grau. Al año siguiente también se rotuló una céntrica avenida de Alicante con su nombre, pero poco después dicha denominación fue suprimida y actualmente se llama avenida José Gutiérrez Petén.
FUENTES:
- Alicante Vivo (http://www.alicantevivo.org/2007/07/alicante-en-el-recuerdo-la-muerte-de.html)
- Wikipedia