Se ordenó sacerdote mosén, al tiempo que mostró un gran interés por la música. En 1756 fue nombrado contralto de la capilla de San Nicolás, luego del fallecimiento de Bartolomé Palomir.

Dado a las condiciones musicales que mostraba Gabriel, el maestro Manuel Comeres decidió cederle la maestría de la capilla, debido a un deterioro de su salud. Así, el mosén Gabriel la ejerció durante unos años extraoficialmente hasta que Comeres falleció en 1764, momento en el que ya se quedó con su titularidad de manera oficial.

8 años más tarde pasó a ser organista de la Iglesia de Santa María. Durante su vida compuso diversas piezas musicales, tales como “Magnificat”, “Beautus vir” o “¡Oh beato Nicolás!”.

FUENTE:

- “HISTORIA DE LA MÚSICA EN LA PROVINCIA DE ALICANTE” Juan de Dios Aguilar Gómez